Diario de León publicó un reportaje dedicado a Héctor Robles Díez, hijo de Ladi y Chano y nieto de Otilia Bayón, como diseñador industrial leonés, creador de la empresa Domo:
Héctor Robles cree que dentro de los éxitos de las empresas, el 80% es
gracias a la estrategia y
el 20% es por la parte operativa.
Reinventando el presenteHéctor
Robles, diseñador industrial leonés, busca a través de Domo, la empresa
creada por él, expandir sus diseños para mejorar a las empresas
Desde siempre he sido inquieto y he
querido aportar mi visión transformadora del mundo. Desde siempre…», así
podría comenzar una biografía de Héctor Robles, leonés de carácter
emprendedor y apasionado por dar al mundo un nuevo aspecto.
Este «diseñador de transformaciones», como el mismo se define, lleva
toda una vida creando proyectos y sin detener el reloj que en su cabeza
le va indicando nuevas ideas. En el colegio logró cambiar una norma que
llevaba vigente 100 años —«Uno no solo crea cuando hace cosas
materiales. Uno puede estar creando cuando decide modificar el Status
Quo», afirma Héctor Robles—. A los 12 años montó un grupo heavy, a los
15 reunió una «importante» colección de vinilos y ponía música en los
pubs, montó «sin mucho éxito» varios negocios escolares, y todo esto
sólo en su etapa adolescente. Héctor agradece que sus padres fueran tan
pacientes con él en su etapa más joven, «alguna bronca me llevé, pero en
realidad fueron muy comprensivos conmigo», relata este leonés.
Héctor es un innovador nato. Él mismo afirma que no pertenece a esta
nueva generación de emprendedores, él no lo hizo por necesidad. «Cuando
lo tenía todo fue cuando decidí fundar mi primera empresa». En el 2001,
«realizando una fuerte inversión», este diseñador indusrial se lanzó a
la piscina y creó la empresa Domo, un proyecto arriesgado y que inició
en solitario. Domo, como su propio diseñador la define es «una empresa
que se dedica a diseñar y desarrollar productos y servicios innovadores
disruptivos. Trabajamos de manera global la experiencia de usuario.
Nuestros diseños se venden en los cinco continentes y suponen un
importante impulso para los clientes que nos contratan».
Repsol, Caser, o la empresa asentada en León FabLab, entre otras
muchas españolas —que van desde multinacionales a pequeñas empresas— que
tienen una cosa en común, «que exportan, por lo que nuestros productos
se encuentran en cualquier parte del mundo».
Este leonés que recuerda que de joven era «bastante provocador y
transgresor», reconoce la dificultad de implantar las ideas de la otra
rama de su empresa Domo, el Honest Strategy Model, un modelo de trabajo
que el propio Héctor Robles define con tres palabras «ser», para
conseguir «hacer» y «tener» resultados. Cree que las empresas, «por la
propia naturaleza humana», son reacias al cambio porque supone salir de
su «zona de confort» y les da miedo los riesgos y lo desconocido. «Es
una actitud natural» afirma. Para este inquieto diseñador industrial
sólo hay un 2,5% de innovadores o pioneros, y son este pequeño
porcentaje de la sociedad los que «lideran el progreso del 97,5%
restante de la humanidad».
Y es que para este diseñador industrial, dentro de los éxitos de las
empresas, «el 80% es estrategia y el 20% es parte operativa», aunque
afirma que poniendo en primer lugar siempre a las personas, que son las
que hacen que «una buena estrategia funcione».
Living Lab
En su currículo aparte de innumerables premios y menciones
internacionales también está la creación del denominado «living lab»,
que su desarrollador define como «es la denominación de Laboratorio
Viviente. En lugar de dilucidar encerrado en unas oficinas qué producto o
servicio será el adecuado, vas en busca de gente real para obtener la
información que necesitas», con el fin de comprender que es lo que
necesitan las personas y así poder entenderlas.
Premios
Héctor Robles asegura que «los premios son lo que menos me importa de
todo», pero no oculta la enorme ilusión que le hizo el premio que le
concedió en abril del 2012 la Design For All Foundation, ya que
se trata de un premio de reputada fama y con un jurado «muy exigente»,
además de, como afirma Héctor, «por ser la única empresa española en
ganar una de las cuatro categorías, la de empresa privada».
Pero la mente de este leonés no para, y afirma tener varios proyectos
pensados para su futuro profesional, desde escribir un libro y diseñar
una aplicación para smarthphones para que «puedan diseñar y personalizar
su propio Honest Strategy Model», hasta preparar un borrador
de un programa de televisión sobre innovación, pasando por la invitación
a fundar la asociación española para la creatividad. Héctor Robles
parece no tener freno.